Millones de usuarios de tarjetas de crédito en Estados Unidos se beneficiarán de una nueva medida implementada por la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB). La medida, que entró en vigor el pasado 1 de marzo, limita las comisiones que pueden cobrar las compañías de tarjetas de crédito por pagos atrasados.
Anteriormente, las comisiones por pagos atrasados podían llegar a ser exorbitantes, lo que suponía una carga financiera significativa para muchos consumidores. En algunos casos, las comisiones podían incluso superar el importe del pago atrasado.
La nueva medida establece un límite máximo de $35 por pago atrasado. Esto significa que, incluso si un consumidor se retrasa en el pago de su tarjeta de crédito, la cantidad máxima que tendrá que pagar en concepto de comisión será de $35.
Se estima que la nueva medida beneficiará a más de 100 millones de usuarios de tarjetas de crédito en Estados Unidos. Se espera que la medida ayude a los consumidores a ahorrar dinero y a evitar caer en una espiral de deudas.
Reacciones a la medida
Las reacciones a la medida han sido positivas. Los grupos de consumidores han aplaudido la medida, considerándola como una victoria para los consumidores. Las compañías de tarjetas de crédito, por su parte, han expresado su preocupación por el impacto que la medida podría tener en sus ingresos.
Impacto de la medida
El impacto de la medida aún está por verse. Sin embargo, se espera que la medida tenga un impacto positivo en los consumidores, ya que les ayudará a ahorrar dinero y a evitar caer en una espiral de deudas.
