La inflación en Estados Unidos, medida a través del Índice de Precios al Consumidor (IPC), se situó en un 2.7% interanual durante noviembre, marcando un leve incremento respecto al 2.6% registrado en octubre, según informó la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos (BLS). Este aumento subraya la resistencia de los precios a descender, a pesar de las medidas tomadas por la Reserva Federal.
Incrementos Mensuales en los Precios
Entre octubre y noviembre, los precios generales crecieron un 0.3%, el incremento más pronunciado desde abril de este año. Aunque los índices de alimentos y vivienda continuaron en ascenso, el índice de energía registró una disminución significativa, cayendo un 3.2% durante el mismo período, lo que incluye una baja del 8.1% en el precio de la gasolina.
La inflación subyacente, que excluye los volátiles precios de alimentos y energía, se mantuvo estable en un 3.3% interanual, pero también reflejó un aumento mensual del 0.3%. Este indicador es seguido de cerca por la Reserva Federal para evaluar las presiones inflacionarias más persistentes en la economía.
Vivienda y Alimentos: Motores de la Inflación
El índice de precios de la vivienda mostró un incremento interanual del 4.7%, con un aumento mensual también del 0.3%. Mientras tanto, los precios de los alimentos subieron un 0.4% en noviembre en comparación con octubre y un 2.4% respecto a noviembre de 2023.
Contexto y Reacciones de Política Monetaria
La inflación alcanzó su punto más alto en junio de 2022, con un 9.1%, antes de comenzar una tendencia a la baja. Sin embargo, el nivel actual de 2.7% marca un repunte desde el mínimo de 2.4% observado en septiembre, el nivel más bajo desde febrero de 2021.
El mercado laboral sigue mostrando fortaleza, un factor que, junto al enquistamiento de la inflación, podría llevar a la Reserva Federal a tomar un enfoque más cauto en cuanto a la reducción de tasas de interés. Según analistas, durante la reunión del Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal la próxima semana, se espera un recorte de un cuarto de punto porcentual. Este ajuste dejaría las tasas de interés en un rango de 4.25%-4.50%.
Perspectivas Futuras
Aunque las caídas en los precios de la energía y las reducciones graduales en las tasas de interés ofrecen cierto alivio, el repunte en los precios de alimentos y vivienda, junto con la inflación subyacente, podría significar que el regreso a un entorno inflacionario más controlado será un proceso prolongado. Las decisiones de la Reserva Federal en los próximos meses serán clave para determinar la trayectoria de la economía estadounidense en 2024.